Con un gesto de molestia Aurelio Morales se desplazaba con dificultad hacia la salida de la Consulta Externa del Hospital Roosevelt. ¿El motivo?, enfrentó un viaje de 8 horas desde su hogar en Melchor de Mencos, Petén, para ser tratado por una fractura de tobillo que descuidó y lo que recibió fue una nueva cita para diciembre.
En los últimos cinco días, decenas de personas han enfrentado situaciones similares a la de Morales, luego que los médicos paralizaran el servicio en la Consulta Externa por el impago de salarios y desabastecimiento de insumos.
Rafael Pivaral, representante de la Junta Médica, argumentó que la medida será retirada hasta que se garantice el abastecimiento de 28 medicamentos cruciales para continuar con su labor, pero ¿cuáles son esos insumos indispensables para que se retome el servicio?
Los medicamentos van desde analgésicos y antibióticos comunes, cuyo valor individual no supera los 5 quetzales, hasta sustancias para el tratamiento de cáncer y enfermedades crónicas con un costo que sobrepasa los 1 mil quetzales.
Al respecto, el director del Roosevelt, Carlos Soto, indicó que si bien, se mantiene un abastecimiento del 76 por ciento de insumos quirúrgicos y del 80 por ciento en medicina; el problema está en que el porcentaje restante corresponde a artículos indispensables para un centro asistencial.
Soto señaló que ese desabastecimiento se ve afectado además por el hacinamiento que experimenta el hospital, ya que esto genera la proliferación de infecciones nosocomiales y otro tipo de contagios que no pueden ser atendidos por la falta de antibióticos y analgésicos.
Así también, se refirió a la falta de ropa quirúrgica, situación que ha llevado al aplazamiento de algunas operaciones, con el fin de utilizar “lo poco que tenemos” para las emergencias.
El ministro de Salud, Mariano Rayo, dijo que para atender la crisis de uno de los hospitales más grandes del país se aumentará el espacio presupuestario entre 60 y 70 millones antes de que concluya el año y se dará prioridad a la compra de los medicamentos más utilizados.
Sin embargo, Soto señaló que la dificultad es que en ocasiones anteriores, el Ministerio de Finanzas ha aprobado transferencias que tardan en llegar a los proveedores y esto complica la adquisición de insumos.
Otro de los factores señalados por Soto, es que la falta de recursos y tiempo para llevar a cabo una licitación, obliga a las compras directas, situación que desfavorece en precios y transparencia.