Queridos mininos: la caja de arena ya pasó de moda, lo nuevo es el uso del inodoro para humanos para que las necesidades fisiológicas desaparezcan.
Si no lo creen conozcan a Plomo, un gatito blanco y negro que ha hecho de el baño de sus "roonmates" su trono personal.
Esta es la divertida historia del felino, cuyo hogar pasado eran las calles. Todo cambio cuando alguien le dio un espacio en su hogar y el corazón.
Su dueña, Myriam Alcayaga, dijo a medios locales en Antofagasta, comuna de Chile, donde reside, que al principio todo era un desastre pues el gatito marcó su territorio en toda la casa, pero que, al darse cuenta que ella y su pareja usaban el baño, él comenzó a seguir el ejemplo.
El minino se sentía tan a gusto que no tuvo necesidad de usar la caja de arena, compartiendo el sanitario con los habitantes del espacio.
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* Con información de El Ciudadano