Una situación, que pareció sacada de una película de persecusión policial, se registró esta mañana en la salida al Atlántico, en el norte de la capital.
Era mañana con intenso tráfico, como usualmente se hace por ese sector, cuando miles de automóviles intentan ingresar por el norte de la ciudad, en la carretera que viene del Atlántico. En el kilómetro 7.5, en el sentido de ingreso a la ciudad, un piloto atropelló a un motociclista. En vez de detenerse para prestar los primeros auxilios, intentó darse a la fuga.
Según testigos, el piloto intentó huir, pero por el intenso tráfico que había para el ingreso, debió hacer una maniobra precipitada y peligrosa, ya que tomó el carril contrario, sin importarle de ir en contra de la vía. Posteriormente, intentó incorporarse en el carril reversible, que se encuentra en el viaducto de Lomas del Norte.
Fue en ese viaducto donde agentes de la Policía Municipal de Tránsito (PMT) lograron darle alcance. Le atravesaron un automóvil de la institución, pero a partir de ese momento la situación se tornó tensa.
Ante ello, algunos agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) se presentaron al lugar para la identificación del conductor. Pero él no se lo tomó muy bien y los recibió con amenazas de arma de fuego e hizo señales de pertenencia a una mara. "Empezó a tirar barrio", señaló Amílcar Montejo, en un reporte a la cadena Emisoras Unidas.
El conductor se atrincheró dentro de su vehículo y permaneció así durante al menos 30 minutos. Posteriormente una persona que le acompañaba abrió una de las puertas del vehículo para que lo capturaran. La acompañante se encontraba en shock nervioso, según indicaron las autoridades; se desconoce si por lo sucedido con el motorista o estaba siendo amenazada por el conductor.
El conductor fue trasladado a la Torre de Tribunales para que resuelva su situación legal, mientras que el vehículo será consignado por las autoridades.
El motorista que fue arrollado solo presentaba lesiones leves, por lo que no fue necesario su traslado hacia un centro asistencial.
Debido a esta caótica y tensa situación, el tránsito vehicular llegó hasta el kilómetro 13 de ingreso a la capital mientras que en la salida al Atlántico, hasta la zona 6.