Antes de la muerte de Osama Bin Laden por las fuerzas estadounidenses en el 2011, sus influencias eran una preocupación para la CIA, así que en el 2005 la agencia consideró seriamente un plan para demonizar al líder de Al Qaeda a ojos de los niños.
Específicamente, la CIA llamó al famoso juguetero Donald Levine, el padre de G.I. Joe, para que produjera una horrenda figura de acción de Bin Laden. Un material especial que se derretía con el calor fue utilizado para que la piel de Bin Laden se pelara y revelara un diablo satánico con ojos de reptil.
Incluso la CIA mandó a hacer algunos prototipos, pero ahora insiste que nunca avanzaron con la idea. “Para nuestro conocimiento, solo habían tres figuras de acción creadas con el propósito de saber cómo se vería el producto final” dijo una persona al Washington Post.
(Tomado de Theverge.com)