Lo primero que escuchas al entrar a la Casa del Niño, son las canciones de cuna interpretadas por las niñeras, con esa voz de antaño como las cantaban las abuelitas; niños jugando y bebés haciendo su siesta.
La Sociedad Protectora del niño es una institución que nació hace 96 años con el objetivo de poner a la disposición de las familias guatemaltecas una guardería que fuera accesible económicamente, donde se enseñen valores, sea un lugar de amor y sobre todo de educación.
Miles de pequeños han sido cuidados en estas “Casas del Niño” las cuales conforman actualmente seis hogares en donde los niños de meses de edad hasta seis años son cuidados y educados con amor y paciencia por parte de las niñeras.
Lilian Ramos es una de las niñeras que cuidan y crían a los pequeños con dedicación y amor desde hace 23 años en la Casa número 2 ubicada en la zona 1, cuando inició como niñera, cuidó a una pequeña de seis meses de nacida y ahora cuida a su hijo quien tiene la misma edad. “Para mi es muy emocionante porque he visto crecer a muchos niños que ahora son profesionales, hombres y mujeres de bien”, afirma Ramos.
Los pequeños realizan actividades para desarrollar sus sentidos, así como su motricidad, entre otros.
Tania Rosales madre de una niña de cinco años, afirma que para ella la Casa del Niño es un lugar donde deja a sus pequeños con los ojos cerrados, sabe que están seguros y que son cuidados con amor.
La Sociedad Protectora del Niño es una organización no lucrativa que existe por los aportes y donaciones de personas y empresas.
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