Seguramente hay un responsable de mantener las carreteras del país en buen estado, o sea tenerlas amplias, bien pavimentadas o asfaltadas, sin baches y oportunamente señalizadas. En muy pocos lugares se disfrutan de excelentes carreteras, como la de Guate a Xela, vía Tecpán. He visto que en algunos departamentos están trabajando en ellas, pero la mayoría están en un triste olvido: son terribles.
Las buenas carreteras significan progreso. Permiten llegar rápido, no destruyen los automóviles, reducen los costos de las mercaderías, y abren la posibilidad de disfrutar de un viaje. Exactamente, disfrutar para aquellos que viajan por placer. Turismo pues.
Sololá es un departamento conocido por sus atractivos turísticos. ¡Quién no conoce Pana, Santiago Atitlán o San Pedro la Laguna ! Justamente para llegar a este último municipio desde Guate hay 177 kilómetros y desde Xela 77. De la capital hasta el kilómetro 150 la carretera está en óptimas condiciones. Pero desde ahí hasta San Pedro la Laguna sólo hay 27 kilómetros, pero uno siente que fueran casi 100. El viaje de placer se vuelve tortuoso cuando para recorrer 27 kilómetros necesitas casi 75 minutos, o sea casi 3 minutos por kilómetro. Dicho de otra manera, implica transitar a un promedio de 20 kilómetros por hora. A parte de ir despacio, tienes que evadir inútilmente casi 300 baches por cada cien metros, tragar polvo espeso en verano y sufrir lodo barroso en épocas de lluvia.
Dicen “los expertos” que Guatemala tiene gran potencial para el turismo. Que para que dejemos de ser pobres el turismo es una de nuestras importantes soluciones a corto y largo plazo. Pero no cualquiera puede animarse a viajar. Si piensas ir con tu familia y tienes auto, pues lo ideal es que sea alto y de doble tracción para evitar quedarte atascado en alguno de los cientos de “bachecitos”. Entonces, si la carretera hacia este destino está en mal estado los turistas no van a tener tantos deseos de hacer el viaje y lo malo es que municipios como Santa Clara, Santa María, San Marcos, San Pablo, San Juan y San Pedro pierden una oportunidad, literalmente, de oro para mejorar sus condiciones económicas.
Lo que provoca tristeza y cólera es que esta carretera fue anunciada con cohetes, bombas (voladas les decimos aquí), comidas, bebidas y demás fiesta, que iba a ser pavimentada totalmente. Hasta se dio un plazo de un año para terminarla. Llegaron hasta las más “altas autoridades” para dar el banderazo de salida. Eso fue hace casi dos años. Pavimentaron una pequeña parte, pero nadie sabe, nadie supo donde quedó el resto del dinero, pero fue horrible, es horrible. Y yo, porque tengo que trabajar como tantos miles de paisanos, me toca salir de viaje mañana y estaré probando nuevamente mis capacidades de evadir hoyos.
¿Alguien conoce al responsable de tener las carreteras en buen estado? Si lo ven por favor díganle que aquí urge su presencia.
