El jugador de esquina de los Eagles de Filadelfia, Nate Allen, estuvo detenido por una acusación de un acto lascivo, pero posteriormente fue liberado.
La Policía de Fort Myers (Florida), confirmó la detención de Allen, y dijo que eventualmente lo liberó, sin cargos.
Allen niega las acusaciones y dice que estaba hablando por teléfono e iba conduciendo después de haber salido de un restaurante cuando la Policía lo detuvo.
En declaraciones a medios de comunicación, Allen indicó que "simplemente no puedo entender porqué alguien se presta para hacer una acusación así".