La bomba explotó y esta vez con implicaciones para Guatemala. El Departamento de Justicia de los Estados Unidos vinculó a un nuevo grupo de 16 directivos del fútbol de las condeferaciones del Centro y Sudamérica, Concacaf y Conmebol, al escándalo conocido como #FIFAGate o #CasoFIFA.
La jornada comenzó en Zurich, Suiza, donde fueron detenidos Alfredo Hawit, hondureño presidente de Concacaf, y Juan Ángel Napout, paraguayo presidente de Conmebol. Posteriormente, se supo que el Buró Ferederal de Investigación de Estados Unidos (FBI) allanó las instalaciones de la empresa "Media World" en Miami, que maneja los derechos de transmisión de televisión en estas confederaciones.
Más tarde, llegó la conferencia de la Fiscal estadounidense Loretta Lynch, quien aportó detalles acerca de las acusaciones en contra de los 16 nuevos implicados, entre los cuales hay tres directivos guatemaltecos: Brayan Jiménez, Héctor Trujillo y Rafael Salguero, en estos casos de corrupción. La intervención de Lynch resumió un informe de más de 200 páginas, en el que se detalla cómo operó cada uno de los 16 implicados desde de sus federaciones nacionales.
El informe de la fiscalía se hizo público horas mas tarde, y narra, en el caso de Guatemala, cómo se gestaron los sobornos. Así ocurrió:
El Departamento de Justicia de Estados Unidos explica cómo en marzo de 2010, cuando Brayan Jiménez ya era el Presidente de la Federación Nacional de Fútbol, Héctor Trujillo era el secretario general de la Fedefut, y Rafael Salguero se desempeñaba como un influyente directivo de la FIFA, negociaron con la empresa Media World los contratos para el manejo de los derechos de transmisión de televisión y mercadeo en los Estados Unidos.
El informe detalla como Jiménez, Trujillo y Salguero se reunieron en Miami con Jaime Tordin para negociar el contrato para Media World a cambio de un soborno cuya cifra era de seis dígitos. El contrato fue suscrito por Roger Huguet, por Media World, y Brayan Jiménez, presidente de la Federación guatemalteca de fútbol.
Los tres directivos guatemaltecos acordaron la forma en la que el soborno sería pagado progresivamente. Media World llevó a cabo las transacciones desde el Banco de América, en Miami, a diferentes bancos. Jaime Tordin hizo un depósito de 200 mil dólares a una cuenta de Citibank en Nueva York para luego acreditarlo a una cuenta de una agencia de viajes proporcionada por Rafael Salguero quien emitió una factura falsa para el cobro de ese dinero.
El informe explica cómo en febrero de 2014, Jiménez y Trujillo negociaron con Media World los derechos de transmisión y mercadeo en Estados Unidos con miras a la eliminatoria rumbo al Mundial de Qatar 2022. El contrato de nuevo fue firmado por Roger Huguet por la empresa Media World, y Brayan Jiménez, presidente de la Fedefut.
Esta vez se reunieron en Miami Jaime Tordin con Brayan Jiménez y Héctor Trujillo, acordaron el pago de 200 mil dólares que se dividirían entre Jiménez y Trujillo, pero además Jiménez negoció por aparte otros 200 mil dólares que no repartiría con Trujillo.
Los 200 mil dólares que se repartirían entre Brayan Jiménez y Héctor Trujillo fueron girados por Jaime Tordin desde la cuenta del Bank of America, en Miami, a una cuenta del Chase Bank, en Seattle, Washington, que pertenecía a una empresa constructura la cual fue referida por Trujillo.
Sin embargo, Jiménez negoció el pago de una cifra igual pero que él no compartiría con Trujillo, y para recibir el pago utilizó una cuenta en el Banco G&T Continental, la cual estaba a nombre de una persona a la que identifican como el Co-Conspirador #19, un alto exdirectivo de la Federación Nacional de Fútbol. Se hicieron depósitos en julio y septiembre 2014, así como en enero y febrero 2015, que totalizan aproximadamente los 200 mil dólares.
La última reunión entre los directivos Jiménez y Trujillo con Jaime Tordin, de Media World, que se detalla en el informe del Departamento de Justicia, se llevó a cabo en Chicago, Illinois en junio de 2015 y en ella repasaron la forma en la que se habían llevado a cabo los pagos del soborno.
Quizá por todo lo que ya había ocurrido en Guatemala para esa fecha: las escuchas telefónicas y el trabajo de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), Brayan Jiménez señaló enfático en esa reunión que no debían hablar nada de ese tema por teléfono: "¡Nada!, ¡nada!, ¡nada!", dijo.
Mientras tanto, Trujillo aseguró que el pago a través de la empresa constructora no despertaría sospechas pues simuló un contrato para retirar el dinero.
En total y de acuerdo con lo que detalla el informe, Rafael Salguero recibió una parte del pago del primer soborno, cerca de 66 mil dólares (unos 500 mil quetzales).
Héctor Trujillo recibió los mismos 66 mil dólares del primer pago, más su parte del segundo pago, 100 mil dólares que en total suman 166 mil dólares (1.3 millones aproximadamente).
Y quien sin duda más se benefició del soborno fue Brayan Jiménez, quien recibió su parte del primer pago, 66 mil dólares; su parte del segundo pago, 100 mil dólares, y un tercer pago que negoció exclusivamente para él, 200 mil dólares. En total, Jiménez recibió de Media World 366 mil dólares (2.9 millones de quetzales aproximadamente).
Junto a Brayan Jiménez, Héctor Trujillo y Rafael Salguero, el informe del Departamento de Justicia de Estados Unidos menciona a dos personas que son parte de la investigación y que se denominan "Co-conspiradores", identificados con un número.
En el caso de Guatemala, se menciona al Co-conspirador #2, quien está relacionado con varios casos pues posee cuentas en el Banco FPB de Panamá, las cuales fueron utilizadas para el pago de los sobornos.
También se menciona al Co-conspirador #19, un ex funcionario de alto rango en la Federación guatemalteca de fútbol, quien presetó su cuenta en un banco local para el deposito del pago acordado como soborno.
Consulta aquí el informe completo del Departamento de Justicia. Lo referente a Guatemala y la Fedefut inicia en la página 109: