A lo largo del 2014, el alcalde capitalino, Álvaro Arzú, ha dejado ver su lado animal y humanitario a la vez. Primero rescató a “Pashte”, un perro callejero, que luego de recuperarse fue adoptado por una familia guatemalteca.
Luego se compadeció de un caballo, que luego fue entregado a una organización que se ocupa de los animales maltratados, y por el que ha donado los insumos necesarios para su recuperación.
El alcalde se subió a la ola de los cachorros de tigre de bengala del Zoológico la Aurora y presumió su amor por los animales en su perfil de Facebook al retratarse con los nuevos miembros del Zoológico La Aurora.
“Tuve el honor de conocer a los nuevos huéspedes del Zoológico La Aurora: tigres de bengala”, publicó.
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Los tigres de la sesión serían producto del programa de conservación y reproducción de especies en cautiverio en Guatemala.
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