Con una discreta sonrisa, vistiendo un traje oscuro y ante la presencia de su madre, Angela Merkel, se convirtió hoy la mujer más poderosa del mundo al ser juramentada para su tercecer mandato de gobierno. Frente a una gran coalición con casi dominio total y la continuidad de sus políticas en materia de relaciones exteriores y finanzas Merkel posee lo que se podría llamar una "aplanadora política".
La prensa señala que esta votación fue todo un récord en la historia de la República Federal de Alemania, superior al 70.9% que logró Kurt Kiesinger en 1966, y al 64.9% con el que Merkel se convirtió en la primera mujer en ocupar la cancillería alemana en 2005.
De esta manera Angela Merkel reasumirá sus funciones y en particular su liderazgo al frente de la economía europea, tras tres meses de ausencia luego de ganar las elecciones en octubre pasado. Incluso este miércoles viajará a Paris adonde viaja junto al nuevo ministro de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier. Posteriormente acudirá a la cumbre de la Unión Europea con líneas de acción consensuadas de acuerdo a la postura del eje franco-alemán.
Mientras tanto el líder de la oposición Gregor Gysi indicó que su trabajo no consistirá en criticar, sino también en definir un control parlamentario. Además los opositores consideran que la coalición está destinada a no subsistir durante los cuatro años de la legislatura.
Entre los retos que debe afrontar Merkel está la unión bancaria, la reconversión energética, las jubilaciones, defensa y la política exterior que siempre causa controversia entre los miembros de los países de la Unión Europea.
(Con información de agencias EFE y AFP)
